Pablo Peraza tiñe de escarlata el Siglo XXI con soberbia actuación
Mérida.- Bendito sea Jehová mi roca. Quien adiestra mis manos para pelear. Y mis dedos para la guerra. Salmo 144: 1. Con ese lema en su pantaloncillo y una perfecta preparación física, enormes, sensacionales recursos técnicos y gran táctica, el chamaco Pablo Peraza Cardós lanzó su candidatura a ídolo al vencer en toda la línea…