En la ceremonia de peso este jueves, ambos contendientes superaron sin problemas el trámite de la báscula, incluso pesando por debajo de las 154 libras acordadas, y coincidieron en que ofrecerán una pelea espectacular.
Bohachuck confía en su pegada y preparación; Dávila, en su talento y hambre de gloria.
PLEITO DE ALTÍSIMO VOLTAJE Y DE MUCHA CLASE
El ingeniero electromecánico de Cacalchén, Yucatán, enfrentará a 10 rounds en peso minimosca al jalisciense Érik “Habanerito” López (14-5-1, 10 ko’s).
López, con más experiencia que el guerrerito maya, ya tiene experiencia en el extranjero tras pelear en Panamá, meses atrás, con el invicto Daniel Matellón, quien pujó para vencerlo por decisión mayoritaria en su propio suelo.
Puch, a quien desde ahora llamamos también “El Expreso de Cacalchén”, y López subieron a la báscula con gran confianza, y demostraron que hicieron una gran preparación, por lo que podrían “robarse el show” este viernes…cosa que es muy probable.
POR SI FUERA POCO
Otro duelo que se espera intenso y sumamente disputado, será el que protagonicen dos sólidos talentos, de dos de los semilleros boxísticos más importantes del país.
El sonorense Daniel “Caballo” Lugo (21-1-0, 16 ko’s), combatirá a 8 rounds en peso pluma ante el jalisciense Miguel Mateos Moreno (11-0-0, 7 ko’s), en un enfrentamiento de poder a poder.
Ojo a los aficionados, pues López es un caso ya raro en estos tiempos que amalgama boxeo con tintes de exquisitez a la defensiva, desde donde puede ser efectivo y, también, letal con sus larguísimos brazos que emplea con verdadera maestría aún retrocediendo.
EL “Chinito” López, con una carrera amateur más que sólida, pinta para cosas enormes, pero ojalá tenga conciencia de que aún no ha logrado nada y que el camino al éxito es aún largo.
La función será a puerta cerrada, siguiéndose los protocolos de prevención y sanidad de las autoridades de salud y de la Comisión de Boxeo de Mérida (CBM).
