Mérida.- En una decisión que regresa a Yucatán la ilusión de ser el líder deportivo del sureste y de la Península, la Comisión Nacional de Cultura Física y Deporte (Conade), anunció su decisión de cambiar el medallero de los últimos Juegos Nacionales en los que cayó más de un 100 por ciento, respecto al cuarto sitio que había preservado a partir de 2017.
Yucatán, como ya todo mundo sabe, quedó en el noveno sitio de los últimos Juegos Nacionales (antes era la Olimpiada Nacional), sufriendo el mayor fracaso de su historia, al menos la reciente y quedando, incluso por debajo de Quintana Roo, estado al que siempre había superado con holgura.
Pero quiso el destino que Ana Guevara se condoliera de Yucatán y en una de sus “jugadas”, sorpresivas, decretó su regreso al cuarto sitio, para devolver la calma al Instituto del Deporte de Yucatán (IDEY), donde el retroceso causó mucha “pena” y “preocupación”.
Así, la 4-T le guiñó el ojo a esta entidad, pero le causó un “entripado” a la gobernadora y correligionaria suya, Mara Lezama, quien se sentía ya la “mera mera” del deporte del sureste del país con el séptimo lugar ganado.
Los yucatecos, que siempre habían figurado en los primeros sitios del deporte mexicano, agarraron tremenda fuerza, durante la gestión de Juan Sosa Puerto (en el gobierno de Rolando Zapata), quien condujo al estado a ser el líder de todo el sur de México con el cuarto escaño, en 2017 y 2018, manteniéndose esa inercia hasta 2019, tras lo cual se vino abajo.
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