Mérida.- A cinco años de su inauguración con “Bombo y Platillo”, la estatua de Miguelito “El Rey de los Pastelitos” muestra la peor cara que el singular pastelero habría deseado ver de sí mismo.
Olvidada, vandalizada, ultrajada, rota, muda (ya no grita su tradicional pregón), la estatua, o lo que resta de ella, permanece aún de pie en el mismo sitio en el que fue inaugurada el 16 de febrero de 2018 por la alcaldesa (ahora Secretaria de Gobierno) María Fritz Sierra.
La estatua, el día de su inauguración el 16 de febrero de 2018 y en la actualidad (derecha).
La efigie del pastelero, fallecido el sábado 8 de octubre de 2016 en Umán, ha perdido, o mejor dicho, le arrebataron parte de la espalda y con ella el equipo de sonido que “lo devolvía a la vida” con su pregón que por décadas entonó en los parques Carta Clara y Kukulcán.
El vídeo, del compañero perodista y presentador, Mario Peniche Gorocica, muestra cómo sonaba la estatua el día de su inauguración.
https://www.youtube.com/shorts/t-ccA_iC3Sg
Arriba, el vídeo, sin el audio del popular pastelero.
Al frente, en la bolsa superior izquierda, tenía un botón que activaba el sonido del conocido e inolvidable pregón del “Rey de los Pastelitos”.
Hay que señalar que si bien la cubierta tenía una “pasadita” de bronce, este no era su material, sino plastilina y concreto polimérico, como en su momento lo declaró a península deportiva su autor, el escultor Reynaldo Bolio Suárez.
La espalda en la que había un pánel para el sonido, fue desmantelada por maleantes, para llevársela.
El bronce, como es sabido, tiene un alto valor y es constantemente objeto de robo en todo tipo de estructuras, para su comercialización, principalmente, por drogadictos.
Suponemos que el Ayuntamiento de Mérida ya está enterado de este caso y que estará ya considerando qué medidas realizar para reparar los daños.https://www.facebook.com/peninsula.deportiva
Asimismo, poner cámaras y medidas restrictivas para evitar que algún otro malandro pueda vandalizar el monumento, que corona el hemiciclo del béisbol, inaugurado hace ya más de cinco años en ese sitio.
El costo de la estatus en aquél entonces, según lo que extraoficialmente trascendió, fue de 250 mil pesos.
Por cierto, el audio del ya inexistente pregón fue “plagiado” de las redes sociales de Península Deportiva por esa administración del Ayuntamiento de Mérida que ni crédito le dio a esta página editorial.
La estatua de Miguelito, ya sin el botón que permitía activar y oir su tradicional pregón.
