Cinco años ya sin Rafael Mendoza Realpozo
Mérida.- Placiditooo, Placiditoooo, oía entre risas el niño, casi púber, José Plácido Domingo Embil, en la terraza del Hotel Colonial de Mérida, a unos jovencitos adolescentes, que le repetían la frase y el tono burlesco con el que su señora madre, Josefa “Pepita” Embil, lo llamaba. Eran los inicios de la década de los 50´s…