Los Angeles.- Tom Lasorda, el mismo que afirmó haber “sangrado color azul, como el de la franela de los Dodgers” y que los llevó a ganar dos de sus siete series mundiales, murió anoche. Tenía 93 años.
Lasorda, quien en los últimos meses experimentó serios problemas de salud, fue hallado muerto en su casa en Fullerton, luego de un paro cardíaco repentino (muerte súbita).
Hecho a la “antigüita”, pasó toda su vida en el béisbol, desde 1949 hasta 2020 (71 años), solo con los Dodgers, desde que estaban en Brooklyn, hasta su mudanza a California.
Primero como pítcher, Lasorda fue escalando todos los peldaños de la organización hasta convertirse en su mánager, uno exitoso y, sobre todo, muy colorido.
Su personalidad simpática, pero firme en el dugout, lo tiene como quizás el principal referente del cuerpo técnico de esa organización en su historia.
Tras ser hallado en paro, el ya anciano ex manejador fue trasladado de urgencia al hospital, donde fue declarado muerto a las 10:57 p.m. de este 7 de enero.
“Las palabras no pueden expresar mis sentimientos”, tuiteó sobre el caso el ex manager de los Mets, Bobby Valentine.
“Un amigo y mentor durante 52 años ya no está con nosotros. Tommy, nadie jamás llenará el vacío que dejaste. Gracias por todo. Q.E.P.D.”
ACABABA DE SALIR DEL HOSPITAL
En octubre, estuvo en el parque en Arlington, Texas, en su papel de asesor especial del presidente del equipo, Mark Walter.
Allá vio a los Dodgers vencer a los Rays y ganar su primer campeonato mundial desde su equipo de 1988.
Esa Serie Mundial, ¿Quién no lo recuerda? tuvo su punto de ebullición en el primer juego.
Esa noche sabatina, Kirk Gibson logró un improbable, y 99.9 por ciento imposible jonrón sobre Dennis Eckersley, para marcar el rumbo de los angelinos.
En 20 temporadas como entrenador de los Dodgers (1977-96), Lasorda llevó a la franquicia a dos campeonatos mundiales (1981, 1988).
Asimismo, ganó cuatro banderines de la Liga Nacional y ocho títulos divisionales.
Fue, también, un gran desarrollador de talento, como lo hizo con el más grande ícono del equipo en los 40 últimos años, Fernando Valenzuela.
Fue Lasorda, quien confió en él para darle la pelota para el primer juego de marzo de 1981, hace ya 40 años.
Ese día de marzo, el gran zurdo sonorense inició su camino a la épica temporada de ese año y a la gran carrera que le siguió.
Descanse en Paz el gran y simpático Tom Lasorda.