México.- El mexiquense Brandon Pérez completó este sábado el mal fin de semana para el boxeo peninsular al vencer en toda la línea por decisión en seis rounds a un valiente, pero inefectivo campechano Rubén “Romano” Orozco en el pleito inicial de la función transmitida en el serial semanal, “Box Azteca”.
Pérez, pese a su récord de solo cuatro peleas, dos de ellas perdidas y una empatada, lució mucho mejor y en un nivel evidentemente superior al mostrado por el de Hecelchakán, que subió a la tarima con ocho triunfos, cinco de ellos por nócaut y una sola derrota.
El de Acolman, Estado de México, de mayor estatura, ganó sí, por su mayor nivel, pero específicamente por sacar ventaja de su mayor longitud de extremidades, inferiores (piernas) y superiores (brazos).
El ganador tuvo muy buena coordinación a la hora de moverse, adelante o atrás y de tirar golpes, lo que evidenció su mejor técnica y mayor clase.
Fue preciso y, sobre todo, oportuno a la hora de sacar las manos y mantener a raya al campechano, quien fue para adelante, pero sin sacar las manos con la frecuencia necesaria.
Orozco hizo el bending (movimiento de cintura) para entrar a atacar, pero le faltó más hacer fintas previas a la incursión, y se perdió a la hora de estar en la distancia apropiada, pues no tiró los golpes necesarios y no supo cuáles, cómo y cuándo.
Sus impactos, sin embargo, si bien no pusieron en evidente mal estado a Pérez, sí lo cimbraron.
Otra cosa quizás pudo haber sido si el castigo fuera más frecuente, pues pudo haber “aflojado” a Pérez.
Y para terminarla de “amolar”, Barajas no tiró un solo golpe al cuerpo, o al menos a los brazos de su rival, que parecían un objetivo más propicio no inmediatamente, pero sí con mayor certeza.
Ello, por la lejanía de la cabeza y la velocidad con la que el mexiquense se desplazaba.
Orozco, quien se portó “macho” y digno, sobre todo tras un muy fuerte castigo en el tercer episodio, vino por la suya en el cuarto round, en cuyo final castigó e hizo ver estrellas a su, a la postre, victimario.
En el quinto y sexto redujo, no la diferencia en las tarjetas, pero si el claro dominio de Pérez, quien ganó merecidamente y sin asomo alguno de duda la pelea, desde su inicio, hasta su final.
Si Orozco hubiera tirado más golpes, porque sí logró entrar al terreno enemigo y hasta por momentos lo acorraló, la diferencia habría sido inferior y en una de esas, podría haber tenido chance de revertir el script de la pelea.
Perdió claramente, pero ojalá no se desanime y que venga con todo para enmendar el camino, con aún mayor trabajo físico (que mostró en buen nivel esta noche) y aprendizaje.
Fue muy superior el otro, como que se amarro a la hora de tirar madrazos el Romano, pero tampoco hizo el ridículo, como que le falto confianza o le gano el pánico escénico.
Mejoro al final pero el falto meterze más a la pelea no se si guevos, pero algo le falto, pudo haber hecho algo mas el bato
No es lo mismo pelear en merida que en chilangolandia ha quedado claro
Lo bueno es que no le estropearon su carita al mas guapo boxeador del mundo