Mérida.- Al cumplirse el décimo aniversario de la partida física del legendario toletero melenudo Raymundo Torres, le presentamos algunos datos de su vida, muchos de los cuales acontecieron, o al menos, están relacionados con Yucatán.
1.- Su nombre completo fue Raymundo Antonio Torres Ruiz.
2.- Nació en San José de Moradillas, Sonora el 12 de abril de 1958.
3.- Su estatura era de 1.77 metros y su peso oficial era de 78 kilos (pero ciertamente era varios kilos más pesado).
4.- Tuvo infinidad de apodos, el primero fue el “Battling” en alusión al malogrado púgil tamaulipeco “Battling” Torres. Otros más fueron, por supuesto, “Ray”, “Matadiablos” y “Nene”, mote que le fue impuesto por el siempre bien recordado aficionado yucateco Eladio Enrique Blanco Loroño, quien también, cuando estaba enojado con él (por caer en un slump de bateo), le decía “La Metralleta” por causas que preferimos omitir.
5.- Era tartamudo, de ahí que fuera de poco “verbo”. Pero no le hacía falta, a la hora de batear, “hablaba hasta por los codos”.
6.- Si bien destacó y se le recuerda por su potencia con el leño, fue un soberbio, maravilloso jardinero central. Al finalizar la década de los 80´s, la Liga Mexicana de Béisbol (LMB) lo distinguió como el mejor de ese decenio en dicha posición.
7.- Su llegada a los Leones, si mal no recordamos, fue en un sábado de mayo, cuando los melenudos recibían, precisamente, a los Diablos Rojos del México, de los que él era parte estelar de un róster que, entre otros incluía a Juan Monasterio, Maximino León, Gary Gray, Sergio “Kalimán” Robles, Jesús “Samarito” Vega y, claro, Nelson Barrera.
8.- Su ya no retorno al “Averno” y su permanencia en la “Selva” se dio, luego de que el entonces “Presidente Diablo”, sr. Don Roberto Mansur Galán (el más talentoso ejecutivo beisbolístico que hayamos conocido) y el “Domador Mayor”, Don Romeo Magaña Carrillo acordaron el cambio.
Dicho cambio se dio por una muy fuerte suma de dinero de parte de los Leones a los Diablos, a los que “el agua les estaba llegando al cuello”, toda vez que las arcas de los pingos no tenían el dinero suficiente para completar la nómina.
9.- Sus cumpleaños se convertían en una romería en el Kukulcán, a donde fans, sobre todo mujeres del interior del estado, llegaban, principalmente si el 12 de abril caía en domingo, con pasteles y hasta pavos que le entregaban antes del juego.
10.- “Ray” Torres era un tipo reservado, de personalidad muy introvertida, pero podía ser muy agresivo, como lo constató alguna vez un directivo melenudo que fuera de temporada y en una población del interior del estado, coincidió con él en un bar.
Desde mesas diferentes, aquél directivo, ya con tragos de más empezó a tirar indirectas muy directas al “Nene”, quien tras varios minutos de “aguantar vara”, se le fue encima y si no “trapeó” el suelo con aquél imprudente, fue porque con todo y el “pdo” que aquél traía, logró poner “pies en polvorosa” y llegar a su lujoso vehículo.
11.- A su muerte, su familia sufrió un fuerte golpe en el año de 2014, el día 15 de febrero, con la muerte de una de sus hijas.
12.- Su despedida de los Leones como jugador fue ante los Rieleros de Aguascalientes en una noche en la que, con una camisola gigantesca, que cubría buena parte del jardín izquierdo, soltó el que fue su último jonrón, con un batazo que mandó la pelota, en su órbita usual: por encima de las gradas, rebasando las torres de luz.
13.- El de “Ray” fue uno de los tres funerales que se recuerdan en el Kukulcán, donde el dueño de los melenudos, Gustavo Ricalde Durán fue despedido antes de su cremación, al igual que Don Leonel “Coronel” Aldama, pero posterior a su incineración, siendo sus cenizas esparcidas en el diamante.
El sacerdote Lorenzo Mex al frente del cortejo la mañana del lunes 29 de octubre de 2012.
14.- “Ray” fue el tercer jugador y cuarto miembro del equipo campeón de 1984 en fallecer. Antes de él, partieron Don Ángel González, caballeroso masajista del club, el cátcher sustituto, Óscar Raymundo y Fernando Villaescusa Elías.
16.- Su tumba está en el panteón de Xoclán, mismo sitio, donde fue sepultado 20 años antes alguien que lo conoció muy bien: Jorge Alberto Blanco Martínez: “George White”.
18.- El suyo (18) ha sido, por supuesto, uno de los números retirados por los Leones de Yucatán, el equipo con el que más se identificó en su carrera.
