Cancún.- La temporada 2021 de los Tigres de Quintana Roo ha sido de nueva cuenta positiva en cuanto a debuts se refiere, repitiendo el lugar privilegiado en ese departamento, dejando en claro la importancia de contar con peloteros nacionales en sus filas y seguir aportando al béisbol mexicano.
A pesar de su titubeante arranque de temporada, la novena quintanarroense terminó con una marca apenas un juego debajo de los .500 de porcentaje, logrando avanzar a los playoffs por vigésima sexta ocasión en las últimas 27 temporadas, algo que muy pocos equipos pueden presumir.
Los Tigres también tuvieron que reponerse a un sin fin de lesiones presentadas desde muy temprano en la temporada, como fueron los casos de los lanzadores Wilfedo Boscán, Jared Wilson, Juan Ramón Noriega, Raúl Barrón.
Asimismo, con sus bateadores siendo los casos más notorios los de Manuel Orduño, quien se perdió el último mes y medio de la campaña y esta serie de postemporada.
Dentro del marco positivo de la campaña 2021, fue sin duda alguna la revelación del colombiano Reynando Rodríguez, quien pese a no tener mucha suerte con el madero, hizo los ajustes necesarios para aportar al equipo y quedarse con el campeonato individual de robos de la Liga Mexicana de Béisbol (LMB), con 21 estafas alcanzadas.
Además, los Tigres por segunda temporada consecutiva fueron el equipo con más debuts de peloteros mexicanos, al haber sido un total de 12 rostros nuevos en la LMB, que sumados a los de 2019, suman más de dos decenas de peloteros que han tenido la oportunidad de probar las mieles del circuito de béisbol más longevo de México.
Entre esos elementos de primer año destacan los casos del receptor Alexis Wilson quien fue sublíder de la organización en cuadrangulares con cinco, además de ser junto con el lanzador Fabián Anguamea uno de los representantes felinos en los Juegos Olímpicos.
Mientras que en el pitcheo, los aún muy jóvenes Bryan Muñoz y Juan Cosío se consolidaron en el bullpen, al tiempo de que Gerardo Ramírez dio muestras de que puede estar llamado a ser uno de los abridores para la próxima temporada.
Por si eso fuera poco, la novena quintanarroense también le dio la pelota al joven Alexánder Armenta, quien tuvo su primera apertura en LMB a los 15 años de edad y luego volvió a subir a la loma, pero ya con los 16 cumplidos.
EL CIERRE DEL “BETO ÁVILA”
Al final, la salida del estadio Beto Ávila debido para la remodelación del mismo fue repentina y hasta inesperada, pero es justamente ese el nuevo rostro de los Tigres de Quintana Roo para el 2022, un inmueble a la altura de los mejores del país y en el que todos los aficionados podrán disfrutar del inigualable y singular ambiente que lo caracterizará.
La temporada 2022 para los felinos no puede esperar, ya que desde el día de hoy la directiva y el personal administrativo trabajan duramente para llevar a sus aficionados a vivir la experiencia del mejor espectáculo deportivo del estado.