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Mérida.- Celebrar la vida, el tenis, el folclor mexicano y la reanudación del torneo, fueron temas centrales de la lucida, colorida y espectacular fiesta de inauguración del 34º. Mundial Juvenil Yucatán (Grado A), esta noche en la cancha estadio Lorenzo Molina Casares del Club Campestre.
La ceremonia, efectuada ante una gran y entusiasta asistencia, incluyó el desfile de heraldos, el Himno Nacional y los honores a la Bandera; presentación del presídium, un colorido bailable, que incluyó la actuación de un mariachi, discursos, fuegos de artificio y el saque inicial, recibido por el yucateco y sólida promesa del tenis mexicano, Rodrigo Pacheco Méndez.
En su mensaje, el Director del Mundial Juvenil Yucatán, Jorge Haro Giffenig, indicó que era una ocasión digna para celebrar que “se nos dio la oportunidad de retomar este proyecto”.
Apuntó que más de 700 torneos fueron cancelados en el mundo en los últimos 19 meses en el mundo, por la pandemia, entre ellos la edición de 2020 del MJY, con el fin de proteger a jugadores y aficionados.
Recordó que la Copa Yucatán surgió hace 35 años, siendo un torneo de invitación, hasta ser lo que ahora es, uno de los 10 mejores del mundo en la categoría juvenil, en cuya historia han visto acción más de seis mil jugadores de 200 países.
Haro agradeció el apoyo, “en las duras y en las difíciles”, de autoridades deportivas, estatales y municipales, del Club Campestre y de los patrocinadores, sin cuya participación no podría realizarse el torneo.
“El Mundial Juvenil Yucatán está de regreso”, remarcó Haro Giffenig, quien estuvo acompañado en el presidium, entre otros, por el Presidente del Club Campestre, sede del torneo, Arturo Millet Molina y la reina de ese club, Mara Millet Sánchez, así como del supervisor de la Federación Internacional de Tenis, Miguel Ternera.
