Riyadh.- El británico Anthony Joshua noqueó hoy, aquí, a Francis Ngannou con un golpe escalofriante que mandó a dormir al ex campeón de la UFC después de tres caídas.
El golpe final provocó que el árbitro ni siquiera contase hasta 10 en la pelea estelar de este viernes en Arabia Saudita, una victoria que al parecer le permitirá al británico ir por los cinturones de campeonato indiscutido que disputen Oleksandr Usyk y Tyson Fury a mediados del próximo mes de mayo.
El británico hizo una buena lectura de distancias y con técnica, más el aprendizaje de lo que no se debe hacer con la victoria polémica de Tyson Fury, el ex tricampeón mundial de los pesos pesados mandó en tres ocasiones a la lona a Francis Ngannou.
El africano se colocó de zurdo para destantear a su rival, sin embargo eso provocó que dejara abierta su guardia al estilo de la vieja escuela.
Anthony Joshua encontró la llave y en el segundo capítulo volvió a clavar a Francis Ngannou justo en la lona gracias a otro disparo similar al primero.
Pero cuando el ex campeón de UFC quiso levantarse con puro corazón, el golpe en la cabeza lo aturdió tanto que el británico lo cazó con un cruzado que finiquitó la contienda pactada a 10 rounds, sin título alguno de por medio y que apenas llegó al segundo episodio.
Francis Ngannou no se levantaba y causó preocupación en el ring de Arabia Saudita, incluso llegó a recibir un poco de oxígeno a través de una mascarilla.
El resultado permitió a Josghua llegar a 28 triunfos, 25 de ellos por la vía del nócaut, con tres derrotas, mientras que el originario de Camerún peleó apenas por segunda vez como profesional y sumó su segundo revés.
Está demostrado que esas disciplinas artemarcialistas, como pretendan llamarlas están muy lejos del nivel de competencia deportiva de un deporte realmente serio como el boxeo