Las Vegas.- El campeón mundial súperpluma del CMB, Miguel Berchelt y su retador, Óscar Valdez pesaron esta tarde idéntico tonelaje para su pleito de mañana por el cetro del cancunense, al marcar el tope de los 58.967 kilos.
El pesaje oficialmente marcó las 130 libras (acorde al sistema de medidas inglés antiguo en el que fue reglamentado el boxeo) y evidenció que ambos están listos para el muy publicitado y, también, esperado choque de mañana.
Berchelt intentará algo que ya es un “rara avis” en el boxeo y que habla bien de su empresa (Max Boxing)y de él, principalmente, que es mantenerse y hacer historia en una misma división.
En una época en la que con un escupitajo o comiendo un chícharo un boxeador sube o baja de una categoría, Berchelt cumplirá la séptima exposición de un trono al que se aferra desde 2017.
Hoy día, muchos otros boxeadores y campeones como él, llegan a un título, y tras una o dos defensas con retadores, normalmente “X”, ascienden de categoría.
LEGITIMIDAD, NO MARKETING
Miguel Berchelt, pese a su físico de tamaño mayor a la generalidad de los súperplumas, ha sabido mantenerse en ese peso y nadie se lo ha regalado…él se lo ha ganado.
Valdez, a su vez, no el más peligroso (ese lo fue Takashi Miura), pero sí el más completo retador al que Berchelt haya enfrentado, y a diferencia de los previos (exceptuando el asiático), tiene argumentos para destronarlo.
Ciertamente, el sonorense la tiene muy difícil, pero no es algo imposible para alguien como él, que fue capaz de soportar buena parte de una pelea con la quijada fracturada…y ganarla.
Su valor espartano, que lo hizo ganarse el respeto del mundo entero, es algo muy importante, pero no una garantía para soportar el poderío de un hombre como Berchelt.
El de Cancún es capaz de desconectarlo de la conciencia, con o sin ese valor, con un solo golpe, aunque el talento y el conocimiento técnico del sonorense pueden ayudarle a dar la sorpresa.
La pelea será la estelar de un cartel que Top Rank presentará en la “Burbuja Sanitaria” del MGM Grand Conference Center en Las Vegas.
Es una de las más esperadas en el boxeo en la presente tercera década del siglo y aspira a igualar otros combates de mexicanos en la división de los súperplumas.
Entre ellos, los sostenidos por gente como Julio César Chávez, Ricardo Arredondo, Juan Manuel Márquez, o Marco Antonio Barrera.
El que gane será el mejor de la división, o casi; estará muy cerca de ser equiparado con ese fenómeno desbordado de talento y explosividad, oriundo de Baltimore, llamado Gervonta Davis.