Los Angeles.- Han pasado casi tres años del retiro, nunca anunciado, del ex campeón mundial wélter, Antonio Margarito y apenas comienzan a aflorar las causas por las que el llamado “Tornado de Tijuana” (realmente nació en Estados Unidos) ya no volvió a subir a un cuadrilátero a intercambiar cuero.
Ya de 42 años, Margarito (41-8, 27 KOs) se sincera y admite:
“La verdad, es que deseaba continuar, pero mi cuerpo no respondió ya de la misma manera de cundo era joven; eso pensé en mis últimas pocas peleas (fue una campaña de tres) y así le comenté a mi mujer que cuando estaba en el gimnasio, y no era el mismo.
YA NO PODÍA
“Cuando bloqueaba los golpes con mis antebrazos, me lastimaban y los problemas iniciaron, mis codos estaban adoloridos; boxeadores más jóvenes venían en camino y me di cuenta que era hora del retiro“, explicó Margarito a ESPN Deportes.
“Logré cosas que nunca soñé alcanzar, pelear con lo mejor del mundo. Le gané a varios de ellos, sin mencionar con los que perdí. Enfrenté a algunos de o mejores del boxeo de mi tiempo.
“Aún tengo esa satisfacción, que e alguna oasión como niño, mencioné de que mi más grande reto fue ser campeón. Finalmente lo logré y los planes incluyeron ganar más títulos (fue tres veces campeón del mundo) y estoy satisfecho con lo que logré“, dijo.
La última vez que Margarito peleó ganó una muy abrupta ruda decisión técnica sobre Carson Jones, cuando parecía estar a punto de sucumbir, pero un topetazo accidental propició el fin, a su favor, en el séptimo episodio.
Fue la última de una campaña de tres peleas, todas en México, iniciada en 2016, luego de que no le fue autorizado pelear en Estados Unidos por las dudas médicas que había respecto a su ojo derecho, que casi le hizo estallar a golpe puro Manny Pacquiao, cuando pelearon en Arlington, Texas.