Mérida.- Fue la primera de varias ocasiones, no tan brillante, por supuesto como la de Óscar Rivera, pero marcó el inicio de un senda que la franquicia de los Leones de Yucatán seguiría por varios años, para reafirmar al pitcheo como su principal carta de presentación en la Liga Mexicana de Béisbol (LMB).
Ese día, en el Deportivo Veracruzano, Álvaro Soto Orduño lanzó el primer partido sin hit ni carrera en la historia de los Leones de Yucatán, ante el Águila de Veracruz.
Fue solamente un partido a siete entradas, duelo de pitcheo y, por lo tanto, de poco carreraje: 2×0 para los a la postre ganadores Leones de Yucatán.
Soto, el primero de varios que lo imitarían vistiendo la franela de los Leones, fue secundado en esa década por Ken Angulo a Isaac Jiménez.
Tras caer el out 21, Jiménez celebró con sus compañeros en aquél equipo, primero que jugó en el parque Kukulcán, entre los que estaban Juan Carlos “Pollo” Álvarez, Von Joshua y Fernando Villaescusa.
A 40 años, recordamos esta hazaña con gusto y por ello se la traemos a ustedes, queridos fans.