Mérida.- 45 años después, ya ni las piedras y mucho menos el campo donde sucedió existen ya.
Pero la cátedra que Miguel Canto impartió sobre Ignacio Espinal ante unas 13 mil privilegiadas personas en el parque Carta Clara, permanece en la mente de aquellos que la vimos y aún sobrevivimos.
FILIGRANA DE 45 MINUTOS SOBRE LA GRAMA DEL CARTA CLARA
En su tercera defensa del campeonato mundial mosca del CMB, Canto Solís bordó una filigrana boxística a lo largo de 45 minutos, para que al final, el réferi Jay Edson (quepd) y el propio Espinal le levantasen la mano.
“¿Eres de Yucatán?, salúdame a mis amigos por allá, tengo muchos”, nos dijo en 2001 el propio Edson en Las Vegas poco antes de la pelea Guty Espadas jr. vs. Erik Morales.
“Canto fue de lo mejor que he visto sobre un ring, salúdamelo a él y a mi amigo ´Cholín´ Rivero”, dijo Edson, quien estuviera a cargo de peleas de gente como Mohamed Alí.
Y razón le sobraba al ya para entonces veterano publirelacionista de Top Rank, quien, por cierto, moriría pocos meses después.
A él le tocó ser el tercero sobre el cuadrilátero aquella noche del sábado 13 de diciembre de 1975 en una pelea histórica.
Y fue histórica, no sólo por la cátedra de Canto, sino por varios hechos que ocurrieron alrededor de ella.
Esos hechos fueron entre otros, los siguientes:
1.- Fue la primera pelea a la que José Sulaimán asistió ya investido como presidente del Consejo Mundial de Boxeo. Había sido electo apenas ocho días antes en Túnez.
2.- Fue también la primera pelea de Campeonato Mundial de Boxeo a cargo del empresario y mecenas boxístico, William Abraham Dáguer.
3.- En esa pelea, Abraham Dáguer pagó la que hasta entonces y durante unos 30 años fue la mejor bolsa que un campeón mundial mosca cobró: 160 mil dólares.
4.- No hubo transmisión televisiva, toda vez que la empresa no llegó a un acuerdo con Televisa para transmitirla.
5.- El único medio que transmitió la pelea fuera de Yucatán fue una estación radiofónica de la Cadena Rasa.
La transmisión estuvo a cargo de la voz conocedora, inteligente, pero sobre todo chispeante de Jorge “Sonny” Alarcón (quepd).
6.- Canto despejó cualquier duda de su superioridad sobre el ponchador dominicano, a quien venció dudosa y cuestionadamente ese mismo año.
Muchos, incluso, pensaron que el quisquellano le había abollado la corona a Canto, quien se acababa de coronar en Japón.
A final de cuentas, Espinal, en un acto que lo enalteció, terminó levantándole la mano al campeón.
Así, el dominicano se despidió para siempre de Mérida y de la posibilidad de ser campeón del mundo.
Y allá acuñó una famosa frase: “A Miguel Canto solo puede vencerlo Miguel Canto”.