Con Información de Juan Moreno de Torneos y Competencias.com (TYC)
Buenos Aires.- Un total de 11 caídas en solo 240 segundos para un legado a perpetuidad.
Así, hoy, llega a su primera centuria la icónica contienda entre Luis Ángel Firpo y Jack Dempsey, el primer chispazo a nivel mundial del boxeo argentino y Latinoaméricano.
Esa noche se supo que los verdaderos contendientes en América estaban no solo en la mal llamada “América”, sino en todo el continente.
El golpe, o empujón, cabría decir de Firpo, sobre el aún inconmensurable Dempsey, se transformó en una famosa obra de arte e incluso en una escena de Los Simpsons.
El boxeo no estaba reglamentado en el país en los inicios de la década de 1920. Más allá de eso, un púgil era reconocido popularmente: Luis Ángel Firpo.
El juninense, quien se había formado en el Almagro Boxing Club en su adolescencia, ya había tenido su debut en Uruguay y peleaba en la tambipén vecina nación de Chile.
El Toro Salvaje de Las Pampas se había quedado prácticamente sin rivales en estas tierras y, por eso, decidió lanzarse a la aventura en Estados Unidos.
Entre 1922 y 1923, disputó nueve combates: todos fueron victorias (ocho por nocaut). Según detalló Horacio Estol en “Vida y Combates de Firpo”, el boxeador hacía filmar sus peleas para tener los derechos y exhibirlas luego en Argentina.
Después de vencer a Charley Weinert en Philadelphia, le llegó la gran oportunidad por el título: iba a pelear contra Jack Dempsey, “el Asesino de Manassa”, el invicto campeón mundial de los pesos completos en aquella época.
La pelea, unas de las primeras en ser vendidas como “La Pelea del Siglo”, se disputó el 14 de septiembre de 1923, y reunió a 80 mil personas en el Polo Grounds de Nueva York: fue tan salvaje que hubo once caídas en total y no duró ni dos rounds completos.
En el primer minuto, Dempsey tiró ¡siete veces! a Firpo. Sin embargo, el juninense reaccionó y sacó del ring a Dempsey con un derechazo, combinación de golpe y empujón.
Pasaron 100 años de aquel enfrentamiento y aún es materia de debate cuánto tiempo estuvo Dempsey afuera del cuadrilátero, hasta que -con ayuda- logró regresar: se estima que fueron entre 14 y 18 segundos.
Dempsey no estuvo más de 15 segundos fuera del ring, pero esa misma regla indicaba que el regreso debía realizarse sin asistencia externa alguna, la cual no fue así en este caso”, explica el periodista Diego Morilla en el libro “100 años de boxeo argentino en 12 combates legendarios”.
Finalmente, el boxeador estadounidense logró recuperarse y terminó la pelea con un KO en el segundo round.
En Buenos Aires, fanáticos en Avenida de Mayo que esperaban por el resultado (con señales de luces de colores verde y rojo en la cúpula del Barolo) pasaron de la euforia a la desazón a raíz de una confusión en el anuncio. Indignados por el resultado, incluso varios marcharon a la embajada estadounidense para exigir romper relaciones.
Luis Ángel Firpo perdió su chance por el título, pero fue recibido como héroe en su regreso a Argentina. Además, automáticamente se levantó la prohibición que regía en la Ciudad desde 1892 y le dieron la licencia oficial número 1.
A su vez, cada 14 de septiembre, la fecha de su mítica pelea con Dempsey, se celebra el Día del Boxeador en el país.
El juninense y su rival se reencontraron en Buenos Aires, 31 años después de su legendaria pelea en el Polo Grounds: Firpo lo invitó a un asado, al que también asistieron, entre otras figuras, Archie Moore (otra leyenda del boxeo).
El pintor George Bellows retrató la histórica caída de Dempsey, una obra que muchos años después incluso sería una escena en Los Simpsons (en un capítulo de la octava temporada, cuando Homero tira del ring a un rival): algunos vestigios de la legendaria pelea de la que hoy se cumplen 100 años.