Mérida.- Los Leones de Yucatán vencieron esta noche, en otro cardíaco, angustioso partido a los Diablos Rojos del México, de los que se ratificaron esta noche como su némesis, al vencerlos en un improbable, pero, por su corazón y garra, séptimo juego, con score de 7×5, para calificar por tercer campeonato consecutivo a la Serie del Rey.
Los melenudos pusieron broche de diamante a una serie endiablada a la que ellos terminaron echándole agua bendita para volver a eliminar, por tercer año seguido en la serie del sur, a los luciferes, que contando con todo el apoyo de su gente no pudieron con los “Reyes de la Selva” y del sur.
Fue el tercer triunfo seguido de los Leones que así quedaron programados para enfrentar a partir del sábado, en Monterrey, por cuarta ocasión en una serie final a los Sultanes de casa.
El encuentro fue un intenso choque en el que los Leones se fueron al frente 5×1, pero los Diablos vinieron de atrás para empatar, con dos jonrones, en la quinta tanda.
Pero fue un doblete de Luis Felipe Juárez en la alta del octavo rollo el que mandó al plato las dos carreras con las que tomaron la ventaja definitiva.
Después de que los abridores de ambos lados colgaron dos ceros, los yucatecos timbraron tres veces en la cuarta, tomando una distancia de 5×1, para respaldar a su abridor, Henderson Álvarez.
Luego, en la quinta tanda, llegaran dos jonrones para empatar el juego. El primer cañonazo fue de Japhet Amador con Ramón Flores a bordo y luego se apareció Roberto Ramos con jonrón solitario para poner el 5×5.
Entonces el juego se metió en un ambiente tenso donde las ofensivas buscaban aprovechar cualquier error, y fueron los Leones los que capitalizaron con dos carreras, que llegaron con doblete productor de Luis Juárez, que remolcó a Norberto Obeso y a Wálter Ibarra.
Obeso e Ibarra se habían embasado en jugada forzada (tocó la bola y llegó a primera, mientras Sebastián Valle fue forzado en la 3a, y con pasaporte.
El batazo del “Pepón” fue ante Édgar Torres, quien relevó al también sustituto Jeffry Nino, quien a final de cuentas, cargó con el revés.
Vital fue en la parte baja de esa octava entrada la mejor participación del estadounidense Hunter Cervenka con los Leones, al despacharla con escón de ponchados.
Cervenka dejó el terreno para que viniera, Jorge Rondón, que tras aceptar un sencillo del primero en pararse a la caja de bateo, Emmanuel Ávila y “pasaportear” a Julián Ornelas, dominó a Ramón Flores, para lograr el out 27 y quedarse con el salvamento.
Tras el fina, la algarabía y la fiesta de los Leones se desplegó sobre el terreno de juego y en parte de la tribuna, en los jardines, donde la porra yucateca seguía apoyando con todo a sus melenudos.