Foto de portada, de archivo.
Santo Domingo.- El yucateco Andrés Gudiño tuvo quizás el papel principal y más efectivo en el duelo en el que su equipo, Cruz Azul, le dio por fin su primera oportunidad en un juego oficial.
El debut de Gudiño con la “máquina celeste” fue como titular, no como cambio, en el empate a cero goles que el once mexicano logró en esta capital con el ignoto equipo Arcahaie del vecino país de Haití.
DEBIERON CONFORMARSE
Los cementeros, que salían como amplísimos favoritos, debieron conformarse con las roscas en el partido de octavos de final de la Liga de Campeones de la Concacaf (Concahampions).
Su papel fue discreto, pero a final de cuentas muy efectivo en las pocas ocasiones en que fue requerido por la delantero de los haitianos que finalmente lucharon más por el empate.