Con apoyo informativo del prestigiado colega argentino Oswaldo Príncipi.
Ciudad de México.- Más de uno creyó que era una broma cuando leyó la aventurada declaración atribuida a Saúl “Canelo” Álvarez.
“Yo le hubiera ganado con toda seguridad a Carlos Monzón y a Ray Robinson“, han repetido a velocidad luz las redes sociales en las últimas horas.
Pues resulta que sí, que el campeón indiscutido de los súpermedianos, el mismo que de una u otra manera ha rehuido enfrentar a David Benavídez, alegando que ya se ganó el derecho a pelear con quien quiera, si es responsable de esa afirmación.
“Le hubiese ganado con toda seguridad a Carlos Monzón, a Ray Sugar Robinson o a Jake LaMotta”, garantizó, sin inmutarse ante las preguntas formuladas por el célebre Eduardo Lamazón.
A las agrias amenazas vertidas por el “Canelo” hacia el futbolista argentino Lionel Messi, tiempo atrás, en pleno mundial de fútbol 2022, solo expresó tibias disculpas posteriormente.
Ahora crea una rivalidad temporal con otro de los deportistas más trascendentes de la historia argentina, Monzón, además de minimizar a otros dos súperestelares indiscutidos como Robinson y LaMotta en el historial del peso mediano, cuya corona ostentó entre 2015 y 2018.
¿Por qué? El gran candidato, el estadounidense Jermall Charlo, campeón mediano del CMB y hermano mellizo de Jermell, su último retador, apareció festejando el día de San Valentín lejos del gimnasio, entre copas y mujeres, llenando de dudas esta futura confrontación.
¿Será el turno de su compatriota Jaime Munguía? ¿Interesa esta pelea? A muy pocos. ¿Por qué no enfrenta a David Benavidez? ¡Todos quieren ver ese match! Olvídense de eso.
Sin embargo, en el mundo real, en el de la industria del boxeo, comienza a instaurar incertidumbres. Sobre todo, en la valía de su próxima pelea.
Y allí están las claves para que los que aún lo hacen sigan creyendo en él, o en que sus “haters” lo odien aún más, o comiencen a creer en él.
Legitimidad o no…¡¡esa es la cuestión!!.