Baltimore.- El legendario antesalista, Brooks Robinson, símbolo de los Orioles de Baltimore, e ícono de esa posición murió hoy a los 86 años de edad.
“Todos nosotros en Major League Baseball estamos tristes por la partida de Brooks Robinson, uno de los grandes de nuestro Pasatiempo Nacional y una leyenda de los Orioles de Baltimore”, dijo, al respecto, el Comisionado de MLB, Rob Manfred, en un comunicado.
Robinson destacó como uno de los mejores jugadores defensivos que han existido. Fue dos veces campeón de la Serie Mundial, Jugador Más Valioso de la Liga Americana en 1964 y ganador de 16 Guantes de Oro consecutivos en tercera base.
Fue un modelo de excelencia, durabilidad, lealtad y béisbol ganador para los Orioles. Después de su carrera como jugador, siguió contribuyendo al juego trabajando con la MLB Players Alumni Association”, seguió la comunicación de MLB.
Antes del juego entre los Orioles y los Washington Nationals, el público guardó un minuto de silencio. Los equipos formaron fila frente a sus dugouts, para rendir un homenaje a Robinson.
También, antes del encuentro, los fanáticos se reunieron en torno de la estatua de bronce de Robinson, dentro del parque Camden Yards.
Robinson pasó los 23 años de su carrera con los Orioles, antes de la era de los agentes libres. Prácticamente en solitario ayudó a que Baltimore derrotara a los Cincinnati Reds en la Serie Mundial de 1970, y pegó un jonrón en el primer encuentro de la barrida propinada por los Orioles en 1966 a Los Ángeles Dodgers, para que el equipo ganara su primer cetro.
Los Orioles emitieron un comunicado en nombre del equipo y de la familia de Robinson: “Nos entristece profundamente compartir la noticia del fallecimiento de Brooks Robinson.
Parte integral de nuestra Familia Orioles desde 1955, continuará dejando un impacto duradero en nuestro club, nuestra comunidad y el deporte del béisbol”, agregó el texto.
Participó en 18 ediciones del Juego de Estrellas, ganó 16 Guantes de Oro en forma consecutiva y obtuvo el premio al Jugador Más Valioso de la Liga Americana en 1964, luego de batear para .318, con 28 vuelacercas y 118 remolcadas, la mayor cifra en la liga.
“Para generaciones de fanáticos, el talento de Brooks Robinson en el terreno fue superado sólo por su increíble carácter e integridad.
Se le recordará también por su ética de trabajo y el talento que mostró en la esquina caliente, donde se consolidó como uno de los mejores antesalistas en la historia, ya sea al atacar rolas lentas o al capturar lineazos por la raya.