Londres.- Todos lo sabían, comenzando por él, pero no se había atrevido a hacerlo oficial. Hoy lo hizo.
Quizás motivado tras beberse un barril de cerveza, pero sin llegar a los extremos de meses atrás, cuando protagonizó un show en la calle al bajarse de un taxi, Tyson Fury hizo oficial su regreso al boxeo, tras su “retiro”, o mejor dicho, descanso temporal.
Fury fue subido al ring, al anunciarse la trilogía contra Derek Chisora, con quien chocará, una vez más, el 3 de diciembre, en el estadio del Tottenham Hotspur.
Luego de casi ocho años, el campeón de los “megaterios” del CMB volverá a enfrentar a su compatriota, en una contienda que tendrá el condimento de la defensa del título.
Para el “Rey Gitano”, este será el chance de volver al ring, luego de haber insistido con su retiro de la actividad. En abril, tras noquear a Dillian Whyte, dijo que su carrera había llegado al fin, aunque no pudo con la tentación de colocarse los guantes, nuevamente, a los 34 años.
El nacido en Whytenshawe está invicto en 33 peleas y aparece como el gran favorito para vencer a Chisora, por tercera vez. En tanto, su rival, de 38 años, se enfila con la misión de dar la sorpresa.
Este combate resulta valioso para Fury en su intención de medirse ante Oleksandr Usyk, en su deseo por convertirse en el campeón mundial indiscutible de peso pesado, un duelo que podría darse en la primera parte de 2023.